- Los trihalometanos son compuestos químicos que se pueden generar en el proceso de potabilización del agua, cuyos niveles máximos están fijados por el RD 140/2003 por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano. El límite legal máximo de este compuesto es actualmente de 100 microgramos por litro (µg/l).
- Los trihalometanos se forman cuando la materia orgánica que arrastra el agua entra en contacto con el cloro que algunas plantas de tratamiento utilizan en sus distintas etapas. La cantidad y proporción de trihalometanos en el agua depende de la cantidad de cloro añadido, de la cantidad de materia orgánica del agua bruta en origen, de la concentración de bromuros del agua, pH, temperatura y el tiempo de contacto (por eso los valores son mayores en la red de distribución que en la salida de las estaciones de tratamiento).
- En el caso de Aguas del Añarbe, la utilización de ozono -en lugar del cloro- en diversas fases del tratamiento de potabilización la baja presencia de materia orgánica en el agua bruta del embalse y, por lo tanto, su alta calidad (por la casi nula actividad humana, agrícola, ganadera, etc. en la cuenca vertiente al embalse), provocan que la concentración de trihalometanos en el agua potable sea muy reducida (tanto a la salida de la planta de tratamiento como en el grifo del consumidor).
- En 2019 Aguas del Añarbe ha efectuado 11 análisis de trihalometanos a la salida de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Petritegi (Astigarraga), en los que el resultado medio ha sido menor que 3,25 microgramos por litro (µg/l), que es el límite de cuantificación analítico para este parámetro. Así mismo, se han efectuado 103 análisis más en la red de distribución del sistema Añarbe, cuyos datos han ofrecido un resultado de 6,41 µg/l, quince veces inferior al límite legal. Estos resultados están por debajo de algunos de los datos medios presentados en el estudio (11,7 µg/l en Europa o 27,35 µg/l en España) y, en definitiva, en todas las ocasiones, el parámetro cumple muy ampliamente con lo establecido en la normativa vigente.
- Aguas del Añarbe puede afirmar que el agua procedente de su sistema de abastecimiento goza de las mejores condiciones sanitarias y de calidad, y es controlada diariamente, lo que permite tranquilizar a los consumidores en los términos más rotundos.