Recientemente han comenzado las obras de remodelación de la EDAR (Estación depuradora de aguas residuales) Gurutze en Oiartzun donde se recogen y tratan desde 2010 los vertidos de aguas residuales de las viviendas y actividades hosteleras de la zona.
La instalación ha quedado obsoleta para tratar la actual carga contaminante y, a pesar de algunas reformas realizadas en 2021 para modificar algunos elementos y mejorar su rendimiento (cuya inversión fue de 125.000 €), se ha puesto de manifiesto la necesidad de acometer una actuación de mayor envergadura.
Recientemente han comenzado las obras de remodelación de la EDAR Gurutze con un presupuesto de 447.850 €. La alcaldesa de Oiartzun, Joana Mendiburu, y el Director Gerente de Aguas del Añarbe, José Ángel Ercilla, han estado realizando el seguimiento del proyecto. Las obras serán ejecutadas por la UTE Global Omnium Medioambiente, S.L. - Ansareo Obras Construcciones y Conservación, S.A. y su finalización se prevé para el próximo mes de abril.
Las actuaciones principales consistirán en la sustitución del actual sistema de depuración mediante biodiscos (muy extendido para pequeñas poblaciones) por un sistema clásico de reactor biológico mediante aireación prolongada, así como la construcción de un pozo de bombeo y la ampliación del decantador. De este modo, el tiempo de residencia de las aguas residuales será mayor y permitirá realizar correctamente el tratamiento necesario. También se realizarán otras actuaciones de mejora como la remodelación de la instalación eléctrica, la automatización del proceso y la correspondiente sala de control.
Dado que la ubicación de la depuradora proyectada es la misma que la actual, casi todas las fases deberán quedar temporalmente fuera de servicio entre mediados de febrero y mediados de abril aproximadamente, para poder instalar la nueva obra civil y los nuevos equipos necesarios. Durante este periodo, sólo estará operativa la fase del pretratamiento (retirada de elementos sólidos de las aguas residuales) y el vertido a la regata tendrá una carga contaminante superior a la habitual (en cualquier caso, inferior a la que tendría si la depuradora no existiera).
Una vez finalizadas las obras, la instalación depurará correctamente las aguas residuales procedentes del barrio de Gurutze y, a su vez, se cumplirá la autorización de vertido otorgada por la Agencia Vasca del Agua.
